viernes, 6 de enero de 2023

Los ritos funerarios a través de los tiempos

 

Dominika Bernáthová , Zdeñka Kuchyñová

Las investigaciones arqueológicas han revelado informaciones impresionantes sobre los ritos funerarios del pasado y las costumbres de las sociedades prehistóricas en el territorio checo.

La República Checa es una potencia mundial en la cremación que se practica en el 75% de los funerales. La muestra más antigua de esta práctica funeraria, típica para las culturas de los campos de urnas de finales de la Época del Bronce, ha quedado documentada en una necrópolis descubierta en el barrio praguense de Bubeneč. Esta tradición se ha sumado a los entierros esqueléticos hoy conocidos como naturales. La colocación deliberada de los restos humanos en una fosa, una cueva o una tumba ha estado presente desde el Paleolítico Medio.

La forma más regular de depositar los cadáveres en la tierra captada por los arqueólogos era de costado, y también en posición agachada que ha quedado documentada desde el Neolítico hasta el final de la Edad del Bronce Antiguo, según explicó a Radio Praga Internacional el arqueólogo Michal Ernée del Instituto Arqueológico de la Academia de Ciencias de la República Checa.

“La postura agachadase asemeja a la posición del feto en el útero. Por supuesto, tenemos culturas que enterraban cadáveres en posición estirada, como los celtas o los ancestros de la Alta Edad Media”. 

Las causas mortales a través del ADN

La investigación antropológica de un esqueleto brinda datos sobre el sexo y la edad aproximada del difunto. Por su parte, los análisis paleopatológicos investigan sobre las enfermedades y lesiones que pudieron haber causado la muerte. En la actualidad, es popular el método del análisis del ADN antiguo.

“A menudo, aparecen fracturas defensivas que surgieron a la hora de protegerse de un golpe. Podemos detectar heridas curadas y no curadas, trepanaciones en el cráneo, y algunas enfermedades que afectan a los huesos. Mediante el ADN podemos determinar si las personas estaban enfermas. Recientemente se han publicado dos artículos interesantes, uno sobre la hepatitis B y otro sobre la peste, y estas dos enfermedades las podemos identificar precisamente a partir del ADN”. 

Las preferencias alimenticias

Últimamente se suelen aplicar otros tipos de análisis de ciencias naturales, entre los que destacan los isótopos de movilidad, que ayudan a determinar la zona del origen del difunto, y los isótopos de dieta, que indican sus preferencias alimenticias, prosigue Ernée.

“Determinan si comían carne o preferían la dieta vegetariana. En los tiempos prehistóricos, la población era más bien agrícola, cultivaba granos y criaba ganado, ovejas, cabras y puercos. Buscamos huellas que puedan indicar algunas preferencias alimenticias regionales, y en combinación con el ADN algunas preferencias familiares. Resulta que todos comían más o menos lo mismo, pero hay algunas diferencias entre las familias. Incluso hemos descubierto a dos individuos que se salen totalmente de la media, un hombre y una mujer enterrados juntos en una tumba, individuos con un estatus social superior que comían más carne que el promedio de aquella sociedad”.

Los arqueólogos investigan también sobre las relaciones de parentesco entre los individuos y su reflejo en los objetos colocados en las tumbas. Los hallazgos revelan incluso la información sobre el número aproximado de los miembros de las familias, explica Ernée.

“En la Edad del Bronce más antigua, parece que las familias tenían menos miembros y procuraban cuidadosamente que no se produjera una mezcla genética entre los parientes. Sin embargo, se supone que las mujeres podrían haber tenido un promedio de hasta siete hijos en aquella época, que no es poco”. 

La tumba de ámbar más rica está en Chequia

En las tumbas se encontraron objetos con motivos rituales, como recipientes de cerámica y joyas hechas de metales preciosos, ámbar y huesos. El arqueólogo menciona los hallazgos más valiosos.

“En el cementerio de Mikulovice, cerca de la ciudad de Pardubice, se encontró una tumba de una mujer con una gran cantidad de objetos. La tumba proviene de 2000 a. C.  La mujer tiene un hermoso collar de ámbar con más de 400 piedras y actualmente representa la tumba de ámbar más rica de Europa”.

En las tumbas se han descubierto incluso esqueletos de color verde y rojo. El arqueólogo explica la causa de este fenómeno.

“En la Edad del Bronce, los difuntos se enterraban con objetos de bronce o cobre que se corroen y generan el cardenillo verde que cubre el esqueleto. Aunque los objetos de bronce no se hayan conservado, a partir de los huesos cubiertos reconocemos cuáles eran los objetos y en qué parte del cuerpo estaban colocados”.

La edad de las personas de los tiempos prehistóricos era sorprendentemente alta, según demostraron los esqueletos en una necrópolis situada en la localidad de Mikulovice.  Los restos de algunas mujeres indicaron que habían fallecido cuando tenían más de 55 años.

“De hecho, todas las mujeres que dieron a luz al menos un hijo vivieron hasta una edad muy avanzada. En el caso de una mujer hemos encontrado los restos de seis de sus hijos. Entonces no es que la gente llegara a vivir solamente hasta los 20 o 30 años. De hecho, el perfil demográfico de nuestro cementerio es muy equilibrado entre los hombres y las mujeres. A nosotros también nos sorprendió un poco".

Los hallazgos revelan asimismo la información sobre la altura de las mujeres que oscilaba entre 160 y 170 centímetros en promedio, mientras que los hombres tenían unos cinco centímetros más.

Un importante cementerio, cuya investigación ha brindado importantes datos se hallaba frente al Palacio Czernín, en Praga, la actual sede del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Checa. En 2012 se descubrió una extensa necrópolis en el área de la actual biblioteca Václav Havel. El cementerio antiguo más extenso de la capital se encontraba en la actual Plaza Loreto ubicada en proximidades del Castillo de Praga.

 

MÁS INFORMACIÓN


No hay comentarios:

Publicar un comentario