Ecológico 014: Cocina

 

CONSEJO ECOLOGICO 014:
Cocina

¿Qué está pasando?   

La alta tasa de esperanzas de vida que disfruta España es debida a la comida y la filosofia de la dieta mediterránea. Médicos y científicos a nivel internacional reconocen la bondad de la dieta mediterránea por sus beneficios para el cuerpo y la mente y recomiendan que todos sigamos sus pautas para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, cáncer y demencia senil. Los habitantes de España siempre conscientes de esta dieta rica en frutas, legumbres y cereales, sin demasidas grasas animales, ni carne roja, pero, debido a las nuevas demandas actuales, la sabia tradición de la dieta meditarránea se está empezando a perder.

 

La manera de comprar, cocinar y comer se ha ajustado al ritmo de una nueva vida de más horas en el trabajo, más ingresos en el banco, pero menos tiempo para cocinar. Tenemos supermercados. comida preparada, precocinada, platos listos para comer, un nuevo surtido de tentempiés, restaurantes, comida rápida y a domicilio que no solamente traen supuestamente más comodidad, sino también más sal, azúucar, grasas y calorías. Según un estudio de las Naciones Unidas, más de la mitad de los españoles tiene sobrepeso y hoy día se consumen casi 100 calorías más de las que se consumían hace cuarente años y un 15% más de grasa. ¿Cocinar? ¿Para qué si notengo tiempo de hacer la compra, ni preparar la cena habiendo opciones más fáciles? Es así como se va perdiendo poco a poco la tradición que forma la base de una vida sana, que nos merecemos, aunque nos es demasiado tarde para recuperarla.

 

Ultimamente, la dieta mediterránea está de moda a nivel internacional y la Unesco está considerando protegerla como Patrimonio Cultural de la Humanidad, aunque lo bueno de esta dieta no es nada nuevo en España. Es la manera de comer en nuestra tierra y siguiendo las tradiciones de nuestra cultura durante generaciones. Es una dieta basada en una abundancia de frutas y verduras frescas, legumbres y cereales, con el aceite de oiliva como grasa principal. Se consume pescado, frutos secos y vino a menudo, pero también la carne roja, dulces y comidas elaboradas con moderación. Lo mejor de ello es que los ingredientes principales están a mano, y el saber qué hacer cone llos se ha aprendido en la cocina de nuestras abuelas y de nuestras madres.

 

¿Cuál es la solución?

Ahora la claves está en buscar soluciones para nuestra frenética vida, para que la comida y su preparación vuelven a tener la misma importancia de siempre. Muchas veces es tan simple como elegir la mejor opción, por ejemplo, entre un aperitivo frito con sabor a queso o unos frutos secos tostados en aceite de oliva, o entre un bizcocho relleno de nata y chocolate o un plato de fresas y un yogur. Otras veces no nos queda tiempo para cocinar, pero con planificación y previsión podemos dar prioridad a la preparación de las comidas y disfrutar de un momento sano de nutrición.

¿Cómo lo hago?
 

• Cocina y comparte. Cocinar no debe ser una tarea más en tu rutina, sino un placer; cuando el ritmo del día se ralentiza, y si toda la familia ayuda, la preparación será más fácil, menos estresante y un momento importante e íntimo en el hogar.
• Conoce bien la pirámide de la dieta mediterranea e intenta seguirla.
• Si no tienes tiempo, organizate y ahorrarás tiempo y dinero. Planifica un menú cada semana y haz una sola compra semanal. Al llegar a casa, lava, corta y guarda bien, sin humedad, los ingredientes para toda la semana.
• Asegúrate de que en la despensa siempre haya ingredientespara cuando "no hay nada en la nevera", como la pasta o el arroz, así evitarás la tentación de la comida rápida o a domicilio.
• Prepara un plato el fin de semana para llevar entre semana al trabajo, por ejemplo, una legumbres.
• Prepara el doble de comidas fáciles para congelar, como cremas, y tendrás siempre algo sano a mano.
• Elige los frutos secos, la fruta fresca o el queso como aperitivos sanos en vez de los aperitivos salados, fritos y con sabores artificiales.
• El agua es la bebida más sana. Consume zumos que solo contengan fruta, y el vino bébelo con moderación.
• Antes de comprar comida preparada, como una pizza pregúntate: ¿lo puedo hacer yo mismo?.
• Lee las etiquetas de la comida preparada y evita las que tengan muchos ingredientes y aditivos que no sabes los que son. Si no lo puedes pronunciar, mejor no comerlo.
•  En preparar un plato sencillo y rápido de producción básicos como pasta, huevos o arroz se tarda lo mismo que en ir a un restaurante de comida rápida o esperar el pedido de comida a domicilio, cuesta menos dinero y es la opción más sana.

 
LOS BENEFICIOS

Para ti:

• Dieta más sana.
• Más valor nutricional.
• Prevención contra enfermedades.

Para el planeta:

• Menos contaminación.
• Menos desechos.

Fuente: Eco Chic - Pequeños gestos para cuidar de ti y de tu planeta. Páginas 84-87. Margaret Fenwick. Prólogo de Jane Goodall. Ediciones Planeta Madrid S.A. 2010.