domingo, 13 de noviembre de 2011

Parte XI: Vuelta al Alpamayo


LA VUELTA AL ALPAMAYO

DIA DE DESCANSO


El día anterior terminamos algo extenuados, no es sólo el cansancio de un día sino el esfuerzo acumulado de ir andando varios días, como suele ocurrir en las expediciones que son caminatas bastante largas, por eso, habíamos previsto en la programación o itinerario de la expedición un día de descanso.

Pequeña piràmide en un extremo del Tocllaraju


Inicialmente pensamos efectuarlo el quinto día, cuando íbamos a estar acampando en las proximidades de la laguna Safuna, lo cual nos permitiría visitar las otras lagunas que existen en esa zona, pero en el transcurso de la expedición, al tercer día que ante la imponente vista del Alpamayo comenzamos a tener una interrelación más estrecha entre todos, nos percatamos que los amigos que debían volver antes por trabajo o asuntos familiares, estaban con el tiempo algo ajustado, motivo que dio lugar a que cambiásemos el día de descanso para tomarlo en esta fecha, en que ya sólo nos encontrábamos Artur, Manuel, Juan Carlos, Luis, yo y claro Paulino, quién nos asesoró sobre el lugar acampando junto a la laguna de Morococha a 4500 msnm y teniendo una vista espectacular frente nuestro.

Vean las diversas lagunas, Manuel llegó hasta Tocllacocha

Este lugar fue escogido, porque en los alrededores existe una gran cantidad de pequeñas lagunitas e incluso se puede llegar a la base del nevado Paria, o sino pregúntenle a Manuel que se fue a conocer todas y casi casi llegó hasta el mismísimo nevado, en las seis horas que estuvo caminando, pero los más nos tomamos en serio el día de descanso, y como no había que desarmar las carpas ni empacar las cosas, lo que mejor podíamos hacer era pasar las horas echados al aire libre o bajo el cobijo de nuestros dormitorios de todos estos días.

Nótese a Paulino descansando cómodamente echado


Hubiese querido despertar a eso de las 10 diez de la mañana, pero los turistas comenzaron a pasar a las 8, ¿qué pasaba?, habíamos dejado atrás nuestros días de caminantes solitarios, habíamos dejado atrás las rutas por las cuales solo los lugareños y los audaces van, ahora nos encontrábamos en la ruta Llanganuco - Santa Cruz, la segunda más importante del Perú y al ver la cantidad de turistas, entendimos el motivo, nuestros día de descanso fue un constante transcurrir de turistas gringos, españoles, franceses chinos, israelíes, nos hace recordar lo que nos decía Paulino que ahora descansaba cómodamente echado sobre el pasto, los israelíes son los peores turistas, si pueden evitar pagarte lo hacen, bueno, no es nuestro decir sino de alguien que trabaja alli con turistas, pero lo cierto, es que este día de descanso vimos pasar a no menos de 100 turistas, unos iban alegres y cantando, jejej claro, ya habían pasado el abra Punta Unión y estaban en descenso, otros que hacían la ruta al revés, estaban subiendo, y a los 4500 msnm lógicamente ya estaban bastante cansados.

Turistas que fueron pasando durante todo el día


Nuestro día de descanso nos tuvo así, gran parte de la mañana viendo pasar turistas, nosotros descansando echados en la carpa, disfrutando del paisaje y haciendo apuntes de lo que habíamos pasado en el día, algunos turistas iban realmente bien equipados, hasta un comedor completo se instaló junto a nuestro campamento, las agencias brindan esos servicios, cocinero, comedor, nada que extrañar a su vida citadina, lo único que les falta cargar creo es televisor.

Cumbre mayor del Tocllaraju

En la tarde nos decidimos a dar una vuelta por las lagunas, sólo las dos más próximas, calculando el tiempo para ubicar un sitio estratégico y poder hacer algunas tomas del atardecer, enrojeciendo al Taulliraju y que nos permitiera la mejor toma del lugar.

Tocllaraju enrojecido al comenzar el atardecer
Al comenzar a subir con Juan Carlos, que también quería hacer la mejor toma del atardecer, nos encontramos con Manuel que retornaba y ya comenzaba a preocupar, en fin, nosotros no subimos mucho, sólo lo suficiente para darnos cuenta que el mejor ángulo para la toma del atardecer estaba más abajo, bueno, por lo menos caminamos un poco en nuestro día de descanso.

Llamas en el nevado


Así acabamos este día, en el que caminamos por los alrededores sólo a voluntad, pero que realmente nos permitió recuperarnos de tantos días andando seis, siete, ocho o más horas, hoy solamente una pequeña vuelta, que fue suficiente para estirar los músculos y aprovechar únicamente el día para lo que estábamos allí, para descansar.


1 comentario:

  1. si me fui a explorar, y llegue hasta la ultima laguna llamada tocllacocha a 4500 msnm, y tambien me fui a una parte alta en donde habia rocas en donde se veian todos las montañas y les agradeci por dejarme ver sus hermosas lagunas, y de ahi descanse un par de horas en una roca a tomar sol, y luego regrese al campamento sin perderme.

    ResponderEliminar